La entrega del premio precederá al estreno de su último largometraje, Diary of the Dead, nueva entrega de su saga de zombis, que se iniciara en 1968 con la emblemática La noche de los muertos vivientes y continuara con Zombi, El día de los muertos y La tierra de los muertos vivientes.
No obstante, no hay que dejar que la fama de sus títulos protagonizados por los muertos vivientes de Pittsburgh eclipsen otras grandes películas suyas, como ese impecable ejercicio de suspense titulado Pesadilla diabólica (Monkey Shines), la curiosa y muy hippie Los caballeros de la moto, o sobre todo la inquietante y enfermiza Martin, versión del vampirismo como enfermedad psíquica, lejos de todo espíritu fantastique, y que es sin duda un título a reivindicar, y posiblemente su mejor trabajo junto con la mítica cinta con la que debutó.
Si las previsiones no fallan, estaremos allí para contároslo luego.
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