Abandonad toda esperanza

sábado, 19 de mayo de 2007

Julito, el cantante cojito: Las miserias de la canción ligera

A través de doce historias complementarias, Julito, el cantante cojito nos desvela las grandezas y miserias, más numerosas estas que las primeras, de la vida y milagros de Julito, famosa estrella del artisteo español, intérprete de tristes canciones de desamor inspiradas, más o menos, en su vida privada y en sus múltiples relaciones con distintas mujeres.



Por más que se empeñen los autores de Julito, el cantante cojito, cualquier parecido con la realidad es pura intencionalidad. A ningún lector español, salvo que haya vivido los últimos cuarenta años en algún lejano territorio como Islandia, Nueva Zelanda o la Antártica, se le escapará que estamos ante una brutal parodia de la vida y milagros de Julio Iglesias, nuestro cantante más internacional mal que nos pese a muchos.



El guión de Hernán Migoya, un escritor que no se caracteriza precisamente por su sutilidad y sus miramientos por ser políticamente correcto (recuerden el escándalo que rodeó a su libro Todas putas), no deja títere con cabeza: del propio Julito, estrella de la canción melódica, a su numerosa prole, sin olvidar al facha de su padre o al manipulador de su agente (y a la postre hermano).

Mención aparte merecen las brutales caricaturas inspiradas en Ricky Martin, Pedro Guerra o José María Aznar, capaz de una conspiración política que implica un secuestro, y que ríete tú de la manipulación de la opinión pública a la hora de tratar el conflicto bélico en Irak.



El guionista de Desalmado, en nuestra opinión, falla cuando trata de ser tan explícitamente polémico, cayendo a veces en el humor de trazo grueso. En cambio, cuando es más sutil, la obra gana enteros: sobre todo cuando sus páginas dejan ver, tras su despiadada sátira, las miserias del personaje protagonista, sin necesidad de subrayarlas. Igualmente, el brutal retrato que realiza del machismo y el racismo del ciudadano español medio eleva el interés de la obra y pone al descubierto que no es tan ligera como podría parecer en un primer momento.



Con todo, quien se lleva la palma es el ilustrador de la obra, Juaco Vizuete, que aquí se muestra en estado de gracia, reviviendo el mítico trazo de Manuel Vázquez y sus trabajos para la editorial Bruguera en los años 60, con el emblemático Anacleto, agente secreto a la cabeza.

Como ya nos tiene acostumbrados Edicions de Ponent, la edición de la obra está cuidada al máximo: recupera el formato apaisado, poco común en los tiempos que corren (recuerdo el Ice Haven de Daniel Clowes y la reedición íntegra del Paracuellos de Carlos Giménez como otros casos aislados); al mismo tiempo, usa una rotulación demodé y el bitono, ambos elementos que recuerdan a tiempos pretéritos.

Así pues, estamos ante una lectura muy entretenida, y que es bastante menos superficial de lo que parece a primera vista.


Título: Julito, el cantante cojito
Autores: Hernán Migoya (guión) / Juaco Vizuete (dibujo)
Editorial: Edicions de Ponent
Fecha de edición: abril de 2007
104 páginas (bitono) - 13 €

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