Aunque en una industria como la del cómic la mayor parte de las veces la atención de los medios y los lectores se la suelen llevar los dibujantes -algo por otra parte lógico dado que la historieta, como medio visual que es, entra primero por la vista-, siempe ha habido y habrá escritores que cuentan con el beneplácito de la crítica y el público. Y a los autores que, al referirnos al mainstream anglosajón, están en mente de todos (Moore, Gaiman, Morrison, Ellis, Ennis, Millar; incluso Bendis, Waid y Johns; y más recientemente Kirkman...) se han sumado recientemente un par de nombres más. Hoy hablaremos de uno de ellos: Joshua Hale Fialkov.
A Fialkov lo descubrí allá por 2008 al leer su miniserie Elk's Run, de la que en su día dije: "El guión de Elk's Run dosifica la información acertadamente, construyendo los cimientos de la historia contemplando los acontecimientos desencadenantes desde varias miradas, y tomándose su tiempo para presentar a los personajes principales (...). Como el Brian K. Vaughan de Y, el último hombre, o sobre todo como el Robert Kirkman de Los muertos vivientes -obras ambas con las que Elk's Run tiene más de un punto en común, a pesar de la ausencia de elementos fantásticos en esta última-, Joshua Hale Fialkov basa su obra en las relaciones interpersonales de un grupo de personas sometidas a una situación límite, y en la verosimilitud que logran estas al verse plasmadas sobre el papel radica el indudable interés de la ficción (...). Finalmente, hay que señalar que para hacer de Elk's Run una magnífica lectura, que provoca reflexión además de entretenimiento del mejor, el guionista ha contado con la inestimable colaboración de Noel Tuazon, un dibujante que carece de un trazo espectacular pero que cuenta con indudable talento para la narración secuencial."
Precisamente junto al dibujante de aquella obra, Noel Tuazon, Fialkov nos ofrece ahora Tumor, editada recientemente por Norma Editorial. Pero pese a tratarse del mismo equipo técnico, el presente título nos recuerda mucho más a Ecos, también publicada por Norma aunque con dibujos de Rahsan Ekedal. Con esta guarda un par de similitudes más que relevantes: por un lado, su pertenencia genérica al vasto territorio del thriller (aunque aquella se acerque más al terror y la que nos ocupa lo haga al ámbito del género negro o policíaco); por otro, la enfermedad que padece el protagonista de Tumor permite que los autores jueguen con la percepción que este tiene de la realidad que le rodea.
Este personaje central no es otro que Frank Armstrong, un investigador privado al que le diagnostican un tumor cerebral en fase terminal. El mismo día en que recibe tan amarga noticia se le ofrece también una suculenta oferta de trabajo: encontrar a una adolescente desaparecida, hija de un mafioso, para devolvérsela a su padre. En otras circunstancias Frank habría rechazado la oferta, pero el tiempo que le queda de vida es muy poco, y verá en ese encargo la última posibilidad de encontrar algo de redención para los pecados cometidos en el pasado...
La búsqueda de la joven por las calles de la ciudad de Los Ángeles centra el desarrollo de la trama de Tumor: un relato repleto de sorpresas y giros inesperados cuyo devenir argumental está condicionado, como decíamos, por el cáncer que padece Frank, y que altera su percepción de todo cuando le rodea. De esta manera, Fialkov introduce con acierto y sin necesidad de forzar las fronteras de un relato realista como el que nos ocupa uno de sus temas favoritos: los viajes en el tiempo. No en vano, la idea de Tumor surge de sumar los malestares físicos que atenazaban al guionista (unas migrañas crónicas que podrían tener una causa letal), hipocondríaco confeso, y la estructura narrativa de una de sus novelas favoritas: Matadero cinco, de Kurt Vonnegut.
El resultado de esta suma de factores es una obra que ha sido comparada con el film de Christopher Nolan Memento, lo cual ya de por sí no es poca garantía de interés, pero además ha recibido nominaciones como mejor obra recopilada en los premios Harvey y los Eisner del año pasado, sin olvidar los aplausos y ovaciones que le han concedido de forma generalizada tanto la crítica especializada como los propios autores, caso de Jonathan Hickman (Los 4 Fantásticos) o Jeff Lemire (Animal Man). Dados estos parabienes resulta lógico, por un lado, que recomendemos sin temor a equivocarnos dos obras como la anterior Ecos y la presente Tumor; y, por otro, que un guionista como Fialkov acabara dando el salto, como hicieron tantos otros antes que él, al cómic mainstream.
Dicho salto se ha producido de la mano de DC Comics, que ha encargado a Joshua Hale Fialkov el relanzamiento de Yo, vampiro dentro de su Nuevo Universo DC. De dicha serie ya tenemos la oportunidad de leer traducidos a nuestro idioma el primer arco argumental, "Amor impuro", recopilado en el primer tomo de la edición de ECC.
Si podemos hablar de un relanzamiento se debe a que hubo un serial original de I... Vampire!, que alcanzó 24 entregas, y que vio la luz entre 1981 y 1983 en las páginas del magazine de DC House of Mystery. Aquella obra, creada por el guionista J. M. DeMatteis (Brooklyn Dreams) y el dibujante Tom Sutton (Creepy), nos presentaba al protagonista de la obra, Andrew Bennett, un vampiro centenario cuyo objetivo primordial era detener a Mary, la que antes fue su amada, y la que tras convertirse en un vampiro sediento de sangre acabó convirtiéndose también en el enemigo más letal de la humanidad.
Dicho conflicto sigue siendo el eje central de la presente obra, aunque esta se introduzca de lleno en el devenir colectivo del Nuevo Universo DC. Para dejar claro esta pertenencia, enseguida aparecen dos invitados especiales de renombre que, por supuesto, también intervienen en el reboot general que han experimentado los tebeos de esta compañía: Batman y John Constantine. La aparición del primero, huelga decirlo, está justificada por el icono del murciélago, tan vinculado al Caballero Oscuro como al mundo del vampirismo; en cuanto al protagonista de Hellblazer, su breve (pero muy divertida) aparición adelanta el crossover de Yo, vampiro con la Liga de la Justicia Oscura, que tendrá lugar en el segundo número de la edición española de dicha serie, y que incluirá el arranque de la saga "El alzamiento de los vampiros".
Pero no adelantemos demasiado los acontecimientos... Los seis números incluidos en el presente volumen, y cuyos títulos remiten a clásicos de la música pop de las últimas décadas, se centran en presentar el conflicto al que nos referíamos antes: Andrew Bennett es un vampiro de más de seiscientos años atormentado por la culpa que le provoca el haber convertido a su amada Mary Seward en la Reina de la Sangre, líder espiritual de los vampiros; esta ha decidido que llegó el momento de, valga la paradoja, salir a la luz y someter a la humanidad, a la que considera una raza menor, poco menos que ganado del que alimentarse. Entre uno y otro se desata una batalla por la supervivencia; un enfrentamiento en el que, como ocurre con el Profesor X y el Magneto de Marvel Comics, ambos personajes establecen una correlación con los históricos Martin Luther King y Malcolm X en cuanto a su modo de encarar la lucha por los derechos de la población negra en Estados Unidos.
En Yo, vampiro, y con la colaboración de un magnífico Andrea Sorrentino -cuyo trazo recuerda poderosamente al de Jae Lee, que curiosamente ha ilustrado el clásico por antonomasia del subgénero vampírico: la novela Drácula-, Fialkov se propone subvertir los estilemas que caracterizan generalmente la figura del vampiro; algo en lo que, desde luego, no es el primero ni será el último, pero sí logra ser uno de los más destacados, gracias a su trabajo con los diálogos y su retrato de los personajes, desde los citados Andrew y Mary a secundarios destacados como John Throughton o la joven Tig... la cual jugará un papel determinante en el sorprendente desenlace de este tomo. En resumen: una lectura muy recomendable, y que deja con ganas de más.
Título: Tumor
Autores: Joshua Hale Fialkov (guion) / Noel Tuazon (dibujo)
Editorial: Norma
Fecha de edición: agosto de 2012
240 pp. (b/n) - 18 €
Título: Yo, vampiro (Vol. 1: Amor impuro)
Autores: Joshua Hale Fialkov (guion) / Andrea Sorrentino (dibujo)
Editorial: ECC
Fecha de edición: septiembre de 2012
144 pp. (color) - 13,95 €
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