Era uno de esos directores que, a primera vista, no han hecho demasiado ruido en la historia del cine: no se les recuerda como grandes clásicos del séptimo arte ni como genios que revolucionaron el lenguaje cinematográfico. Pero son grandes artesanos que pusieron lo mejor de su oficio al servicio de las historias que contaban y que, en algunas ocasiones afortunadas, lograron rozar la brillantez. En efecto, Richard C. Sarafian, fallecido el pasado miércoles, fue uno de ellos.
Richard C. Sarafian (1930-2013)
Al igual que otros muchos compañeros de generación, Sarafian debutó como realizador a comienzos de los años 60 en la televisión, un medio que nunca llegaría a abandonar del todo, y para el que rodaría episodios de series -la mayoría westerns- como Maverick, Lawman, Bonanza, Dimensión desconocida, Batman, Cimarrón, Yo, espía o La ley del revólver. También sería un film de oeste su primera película para la gran pantalla: Terror at Black Falls, un ejemplo de serie B estrenado en 1962.
Dirigiendo a la pareja protagonista de Los pasos del miedo
Otros filmes destacables de su carrera son Los pasos del miedo (un thriller interpretado por David Hemmings y Gayle Hunnicutt, por aquel entonces matrimonio en la vida real), los westerns El hombre de una tierra salvaje (protagonizado por Richard Harris) y El hombre que amó a Cat Dancing (con Burt Reynolds y Sarah Miles), así como El árabe, cuyo reparto encabezó Sean Connery. Pero su trabajo más (merecidamente) celebrado es Vanishing Point (Punto límite: cero), una de las películas más importantes y representativas de la década de los 70, concebida a partir de un guion del escritor (y crítico de cine) cubano Guillermo Cabrera Infante y que con el paso del tiempo ha devenido en película de culto para sucesivas generaciones de cinéfilos.
Barry Newman en Vanishing Point: sin duda, la obra maestra de Sarafian
A mediados de los 80, Sarafian dirigió dos thrillers bastante discretos: El ojo del tigre, protagonizado por Gary Busey, y el menos popular Street Justice, con Michael Ontkean (el sheriff Truman de la serie Twin Peaks). Posteriormente, ya en 1990, filmaba su última película: Solar Crisis, un relato de ciencia ficción espacial que contó con grandes actores como Peter Boyle, Jack Palance o el mismísimo Charlton Heston. Pero descontento con el resultado final, Sarafian firmó como la cinta como Allan Smithee, el seudónimo que se usa en la industria hollywoodiense para estos menesteres. El film en cuestión supuso de facto su despedida profesional del cine, pues apenas regresaría ocasionalmente de su retiro para filmar un único episodio de la serie Las nuevas aventuras del Zorro en 2011.
El ojo del tigre gozó de cierta popularidad en su momento
A Richard C. Sarafian le sobreviven sus hijos, que también se dedican profesionalmente al cine; el más popular, Deran Sarafian, es el firmante de cintas como Libertad para morir (a mayor gloria del héroe de acción Jean-Claude Van Damme), Velocidad terminal o varios episodios de la franquicia de CSI, House o K-Ville.
Solar Crisis: la (amarga) despedida de Sarafian como director
Richard C. Sarafian nació en 28 de abril de 1930 en New York City, New York, y falleció en 18 de septiembre de 2013 en Santa Monica, California. Tenía por tanto 83 años. Descanse en paz.
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