Los piratas, tanto en el sentido añejo (con La isla del tesoro como clásico de cabecera) como en el contemporáneo (véase una película como Capitán Phillips), siempre han fascinado a lectores y espectadores de diversa naturaleza. Y en muchas ocasiones han sido idealizados como (anti)héroes románticos muy alejados de su verdadera presencia a lo largo de la historia.
A desmitificar esta mirada y a glosar su devenir a lo largo del tiempo están dedicados dos libros recientes, uno de ellos a cargo del alicantino Javier Martínez-Pinna, que recomendamos en nuestra columna de Abandonad toda esperanza de hoy:
El pirata es ya un arquetipo del género de aventuras gracias a la literatura y el cine
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