Abandonad toda esperanza

miércoles, 2 de diciembre de 2009

RIP: Paul Naschy (1934-2009)

El actor, guionista y director Jacinto Molina, más conocido con el sobrenombre artístico de Paul Naschy, falleció en la noche del lunes 30 en Madrid a la edad de 75 años como consecuencia de un cáncer.



De nombre completo Jacinto Molina Álvarez, Naschy ha sido sin lugar a dudas un nombre capital en la historia del cine fantástico español. Tanto es así que con un centenar de películas rodadas a sus espaldas, este licenciado en Arquitectura que llegaría a ser siete veces Campeón de España de Halterofilia tuvo el honor de ser calificado como el "Boris Karloff español".



Fue en 1967 cuando debutó como protagonista en la película La marca del hombre lobo, de Enrique L. Eguiluz, un título que muchos consideran el momento inaugural de la edad de oro del cine de terror español, y que además supuso el debut del único personaje icónico que ha dado nuestro país a la historia del fantastique: el licántropo Waldemar Daninsky. Este es un papel que retomaría luego en otros títulos como La noche de Walpurgis de León Klimovsky, El retorno del hombre lobo (dirigida por él mismo) o Licántropo (El asesino de la luna llena), que a mediados de los 90 supuso el retorno de este personaje de la mano del realizador Francisco Rodríguez Gordillo.



Esto no quita para que Naschy interviniera también en películas de otros géneros nada afines, como la comedia, pero sobre todo en géneros populares como el cine policíaco, el de acción o el de aventuras, así como en la televisión, en programas históricos con fines didácticos o en series de ficción de gran éxito como Querido maestro.



Como director realizó catorce largometrajes, de 1976 a 1992: Inquisición, El huerto del francés, El caminante, Madrid al desnudo, Los cántabros, la citada El retorno del hombre lobo, Latidos de pánico, La bestia y la espada mágica, Operación Mantis, El último kamikaze, Mi amigo el vagabundo, El carnaval de las bestias, El aullido del diablo y La noche del ejecutor.



Otros títulos destacables de su filmografía que pueden englobarse dentro del género de terror -ya fuera en su vertiente sobrenatural, ya en su exploración de los mecanismos del thriller anglosajón o el giallo italiano-, pero que no dirigió él mismo sino realizadores como Javier Aguirre, Carlos Aured o Juan Bosch, son El gran amor del conde Drácula, Dr. Jekyll y el hombre lobo, Los ojos azules de la muñeca rota, El espanto surge de la tumba, La rebelión de las muertas, El jorobado de la morgue, La orgía de los muertos, Una libélula para cada muerto, Exorcismo o Último deseo.



Por si esto fuera poco, últimamente Naschy había comenzado a trabajar de nuevo y de forma más prolífica en el género que le hizo amar el séptimo arte: pudimos verle en School Killer, Mucha sangre, la mediocre Rottweiler y la curiosa Rojo sangre... en la que interpreta a un actor semiolvidado que ve la posibilidad de volver a trabajar en el mundo del espectáculo aunque para ello tenga que pagar un precio muy caro.



No hacen falta más argumentos para demostrar que Naschy, que todavía tiene pendiente de estreno el esperado díptico La herencia Valdemar, es, en tanto que icono popular, la figura más importante del cine fantástico patrio, así como uno de sus realizadores clave junto a nombres como Jesús Franco, Narciso Ibáñez Serrador, León Klimovsky, Amando de Ossorio o Juan Piquer Simón.



Para aquellos que quieran profundizar en su figura, nada como leer los textos que a su vida y obra dedicó Adolfo Camilo Díaz -el libro El cine fantaterrorífico español y sendos artículos publicados en Fangoria, primera época, números 8 y 9-, los capítulos dedicados a su figura en libros comunitarios como Cine fantástico y de terror español, Las tres caras del terror o La marca del hombre lobo, y sus dos biografías disponibles: la primera, la autobiografía del propio Jacinto Molina, Memorias de un hombre lobo; la segunda, la muy reciente Paul Naschy. La máscara de Jacinto Molina, de Ángel Agudo y Ángel Gómez. Como curiosidad, también pueden leerse sus recientes incursiones en el mundo del cómic de la mano del ilustrador Javier Trujillo, con Waldemar Daninsky y su secuela El origen de la maldición, sendas adaptaciones de El retorno del hombre lobo y La bestia y la espada mágica.



Jacinto Molina, alias Paul Naschy, nació en Madrid en 6 de septiembre de 1934, y falleció en la misma capital el pasado lunes 30 de noviembre de 2009. Tenía por tanto 75 años. Descanse en paz.



[Fotogramas: La marca del hombre lobo, Último deseo, El jorobado de la morgue, La herencia Valdemar.]

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