El jardín de senderos que se bifurcan

Tengo que confesar que descubrí a Luis Durán algo tarde, aunque, como se suele decir, nunca es tarde si la dicha es buena. Y créanme, es realmente buena cuando hablamos de lo poco que he leído hasta el momento de este autor vasco.

Nuestro verdadero nombre, su última creación hasta la fecha, fue una auténtica revelación. Como ya comentamos en una nota anterior, en esta ocasión la obra de Durán bebe de las aventuras de Stevenson y de los horrores primigenios de Lovecraft para construir una maravillosa y fascinante historia sobre el poder de la fe en lo mágico.



Ahora, la previa Caballero de espadas me descubre a un Durán más críptico, tan ambicioso como en Nuestro verdadero nombre pero más lírico todavía.

Esta historia es la biografía de Mathius Clockwise, hijo de un relojero que se convirtió en violinista pero que muy bien pudo ser mago; pero en el fondo es una reflexión sobre la mentira (esas llaves que están en el fondo del mar...), el azar y cómo este afecta a nuestras vidas, así como sobre el inexorable paso del tiempo, un maestro que, como bien se dice en las páginas de este maravilloso cómic, acaba matando a todos sus discípulos.

Les recomiendo encarecidamente que lean Caballero de espadas. Que lean también Nuestro verdadero nombre. Y, de paso, que lean la siguiente entrevista con el autor:

Comix: Entrevista Luis Durán