El pasado sábado 23 de abril, cuando medio mundo estaba ocupado celebrando el Día del Libro y el cuarto centenario de la muerte de Cervantes y Shakespeare, un director de cine (re)conocido precisamente por las aplaudidas adaptaciones literarias que abren y cierran su breve filmografía nos decía adiós de forma definitiva: nos referimos al cineasta español Miguel Picazo, fallecido pocas semanas después de cumplir los 89 años de edad.
Miguel Picazo (1927-2016)
Tras estudiar Derecho, Dirección de cine y Psicología, Miguel Picazo debutó como realizador por la puerta grande: en 1964 se estrenaba La tía Tula, adaptación de la novela homónima de Miguel de Unamuno que protagonizaron Aurora Bautista y Carlos Estrada, y que le valió a su director varios premios importantes, entre ellos el de Mejor Dirección en el Festival de Cine de San Sebastián. Con el paso del tiempo, la consideración crítica del film -de por sí muy positiva en su día- no dejaría de crecer y acabaría convirtiéndose en una de las películas más prestigiosas y aplaudidas de la historia del cine español.
El retrato de familia de La tía Tula
Esto no impidió que sus siguientes largometrajes no fuesen bastante más discretos: es el caso de Oscuros sueños de agosto (1967), Los claros motivos del deseo (1977) y El hombre que supo amar (1978), esta última un trabajo de encargo protagonizado por la estrella internacional del momento Timothy Dalton. Otro asunto bien distinto fue Extramuros (1985), proyecto más personal y adaptación de la novela de Jesús Fernández Santos ambientada en un convento castellano del siglo XVI, con Carmen Maura y Mercedes Sampietro interpretando a dos de las monjas protagonistas.
Carmen Maura y Mercedes Sampietro, monjas en Extramuros
Al margen de esta breve filmografía como director de largometrajes, Picazo intervino como actor en cinco cintas dirigidas por colegas suyos: es el caso de El espíritu de la colmena de Víctor Erice, El libro del buen amor de Tomás Aznar, Remando al viento de Gonzalo Suárez, Tesis de Alejandro Amenábar y 99.9 de Agustí Villaronga. Al margen de estos datos, cabe destacar que en 1996 fue galardonado con el Goya de Honor por todas su carrera y en 2014 recibió la Medalla de Oro de Andalucía.
Con el Goya de Honor en reconocimiento a toda su obra
Miguel Picazo de Dios, llamado Miguel Picazo, nació en 27 de marzo de 1927 en Cazorla, Jaén (España), y falleció en 23 de abril de 2016 en Guarromán, Jaén (España). Tenía por tanto 89 años. Descanse en paz.
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