Vaya por delante que cualquier publicación con Paco Alcázar dentro ya merecerá la pena, y en esta ocasión son dos páginas y no una breve tira lo que ofrece el creador de Silvio José. Además, se cuenta con un nuevo fichaje: Fermín Solís, del que recientemente hemos disfrutado Lunas de papel.
Pero, claro está, hay mucho más... En la nómina autóctona destacaremos tres historias: Carlos Vermut prosigue su Doble sesión, ahora con un cruce de dos títulos de terror: el clásico El resplandor de Stanley Kubrick y la más contemporánea Ringu de Hideo Nakata; Santiago García y Pepo Pérez ofrecen una breve historia de El vecino, su magnífica mirada a la cotidianidad de un superhéroe patrio; y Jorge Monlongo aporta una nueva entrega de su divertido Distrito Harrigan.
En cuanto a los autores extranjeros, si en los anteriores números su interés era menor que el de los españoles, en este tercer volumen el asunto parece más compensado: Ulf K es el nuevo fichaje, con la estupenda historia Nana; y hay que reconocer que la nueva entrega de Cosmik Roger tiene su gracia.
Mención aparte merece Frederik Peeters: principal protagonista de esta entrega, además de la portada y una interesante entrevista realizada por Óscar Palmer, es el autor de una de las mejores historias de la revista, una críptica e inquietante narración, sin título ni diálogos propiamente dichos, y cargada de simbología, que nos ha recordado a la espléndida La voluptuosidad de Blutch.
Como les decía: una revista de compra obligatoria, porque supone una manifestación de un equilibrio perfecto entre el tebeo nacional y la historieta extranjera, entre el tebeo experimental o de vanguardia (Peeters, Javier Olivares) y el comercial (Sergio Córdoba, Manuel Bartual). Un logro digno de todos los aplausos.
Título: El Manglar n.º 3
Autores: Varios autores (guión y dibujo)
Editorial: Dibbuks
Fecha de edición: mayo de 2007
68 páginas (color) – 3,90 €
[Imágenes: 2.ª: El vecino, por P. Pérez; 3.ª: J. L. Ágreda.]
Coincido contigo: el 3 ha sido el mejor número de El Manglar hasta la fecha. Ojalá sigan superándose en cada entrega.
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