El ladrón de días: el precio del deseo

No es la primera vez que el noveno arte y el universo de Clive Barker se cruzan: ya en 1989 y 1990, Epic Comics publicó una serie de historias cortas protagonizadas por personajes y conceptos extraídos del universo de Hellraiser, donde participaron autores de la talla de John Bolton, Bernie Wrightson, Ted McKeever, Kevin O’Neill o Scott Hampton. Y también a principios de los 90, el hoy prolífico Steve Niles adaptó dos de sus "relatos sangrientos", El geniecillo y Jack y Cómo se desangran los expoliadores.



A estas obras se suma ahora El ladrón de días, la versión que de la novela homónima del escritor inglés han realizado Kris Oprisko y el español Gabriel Hernández para IDW, y que aquí publicado Norma Editorial dentro de su colección de cómics de terror "Made in Hell".



Como adaptación de una novela juvenil que es, el argumento de este El ladrón de días es sencillo: Harvey Swick es un niño que se aburre mortalmente las frías tardes de febrero; decidido a vivir una aventura que lo saque del tedio, conoce a Rictus, un inquietante personaje que lo llevará a Villa Vacaciones, misterioso lugar donde las cuatro estaciones se suceden a velocidad de vértigo y donde todas las noches es Halloween.

Pero como era de esperar, no todo resulta tan bonito como parecía en un principio, y Harvey pronto descubrirá que es poco menos que un prisionero...



Barker conoce los resortes del género; es más, conoce los de ambos géneros, el del terror (que le hizo famoso) y el de la literatura para niños preadolescentes. En ese aspecto no tiene nada que envidiar al Neil Gaiman de Coraline, y la adaptación que de la novela hace Oprisko mantiene la carga inquietante y tenebrosa del original literario, presente también en muchos cuentos tradicionales.

Así, el protagonista descubrirá en Villa Vacaciones que conseguir todo lo que se desea no es tan agradable como era de esperar, y que en este mundo nadie da nada por nada. Tarde o temprano pagas un precio por conseguir lo que quieres, y en ocasiones se trata de un precio demasiado alto...

En lo referente al arte del cómic, el trabajo de Gabriel Hernández es sencillamente maravilloso: el diseño de algunos personajes, como el citado Rictus o Jive, el hermano del anterior, está cargados de hallazgos; y basta con ojear las páginas de El ladrón de días para descubrir el peculiar universo que se esconde en sus páginas, y que seguro no habrá decepcionado al padre artístico de los cenobitas.



En definitiva, esta versión ilustrada de El ladrón de días es una auténtica delicia, y el carácter juvenil del material original no debería hacer que pasara inadvertida para los admiradores adultos de una historieta bien hecha: bien concebida por un genio de la literatura de terror, respetuosamente adaptada por un guionista que conoce su oficio, y finalmente puesta en imágenes de forma encomiable por un dibujante en estado de gracia.


Título: Clive Barker: El ladrón de días
Autores: Kris Oprisko (guión) / Gabriel Hernández (dibujo)
Editorial: Norma Editorial
Fecha de edición: junio de 2006
144 páginas (color) - 15 €