Tres meses después de publicar mi crítica de la novela de Virginia Aguilera
Ojos ciegos -de la que también hablé en
esta columna-, vuelvo a colaborar con la revista digital
Calibre .38 con un texto sobre una de las mejores novelas publicadas en lo que va de año:
Mi nombre era Eileen, de Ottessa Moshfegh. Muy, muy recomendable. Y si tenéis dudas, podéis leer la crítica aquí:
No hay comentarios:
Publicar un comentario