Bienvenidos al fin de la trilogía Cornetto

Una de las películas que más me ha gustado últimamente es Bienvenidos al fin del mundo, tercera y al parecer última entrega de lo que debería ser la llamada "Trilogía Cornetto" dirigida por Edgar Wright y protagonizada por los actores Simon Pegg y Nick Frost. Como bien saben los aficionados al cine de todo el mundo, las dos entregas anteriores fueron la muy celebrada Shaun of the Dead y la menos popular Hot Fuzz, renombradas en España como Zombies Party y Arma fatal.

Si en aquella ocasión Wright y su equipo parodiaban respectivamente el cine de terror en clave zombi y las películas de policías en clave buddy movies, aquí se ocupa de otros dos géneros: primero, el que forman las películas que relatan reencuentros de grupos de amigos, al estilo de Reencuentro o Los amigos de Peter; después... otro que prefiero guardarme en la recámara para no estropearle la sorpresa a más de uno, y que no es (o al menos no solo) el cine postapocalíptico que deja entrever el título y del que han hablado muchas de las críticas y reseñas del film.

La película, en cuyo análisis no entraré en profundidad dado que prefiero que pase algo de tiempo para volver a verla y juzgarla más allá del, ya les adelanto, gran entusiasmo que me provocó un primer visionado, es con seguridad la mejor entrega de una trilogía cuyo nivel, al contrario de lo que suele suceder, va en aumento siendo cada entrega considerablemente mejor que la anterior. En este caso, Wright suma a la excusa inicial de la saga (la parodia de un género cinematográfico en concreto) y al verdadero tema central de la misma -que no es otro que el retrato de la amistad- un factor determinante: el paso del tiempo, y lo que este supone o bien de aceptación del mismo y llegada de la madurez, o bien de una negación frontal que acaba generando en complejo de Peter Pan. Así pues, la película puede presumir de lecturas que alcanzan un alto nivel metafórico, extensible incluso a sus propios artífices (¿acaso el film no supone el alcance de la madurez de Wright y del también guionista Simon Pegg como cineastas, o incluso de la comedia paródica como género cinematográfico a tener muy en cuenta?).

Pegg, Wright y Frost: la Santa Trinidad de la Trilogía Cornetto

Como digo, no diré más acerca de la película por el momento... y les emplazo a otra crítica entusiasta, la de Miguel Rojas, en su muy recomendable La taberna de Dunwich (que ya les recomendé aquí). No se las pierdan: ni la crítica... ni por supuesto la película, que creo estará en el Top 10 del cine estrenado este año.