La muerte parece obstinada en no dar descanso al mundo del cine: a la lista de los recientes fallecimientos de Claude Chabrol, Kevin McCarthy, Gloria Stuart, Tony Curtis y Arthur Penn se suma ahora el nombre de Roy Ward Baker, realizador británico fallecido a la edad de 93 años.
De nombre real Roy Horace Baker, su carrera estuvo siempre íntimamente unida al cine fantástico, aunque demostró su versatilidad con todo tipo de géneros desde que debutara tras las cámaras en 1947 con The October Man, un film de suspense protagonizado por John Mills. Sus primeros trabajos los firmó simplemente como Roy Baker, pero finalmente añadiría "Ward" porque su nombre coincidía con el de un técnico de sonido de la productora Hammer Films, para la que empezaría a trabajar veinte años después.
En 1952 filmaría uno de sus títulos más célebres, Niebla en el alma, protagonizada por Marilyn Monroe y Richard Widmark. Y en 1958 estrenaría La última noche del Titanic, sobre la tragedia naval que muchos años después popularizarían con presupuesto mucho mayor James Cameron, Leonardo DiCaprio y Kate Winslet.
Una década más tarde, en 1967, se estrenaría uno de sus mejores trabajos: ¿Qué sucedió entonces?, titulada originalmente Quatermass and the Pit, primer trabajo de Baker para la Hammer Films, y que viene a ser la tercera y última entrega de la célebre trilogía protagonizada por el doctor Quatermass.
Durante mucho tiempo Baker alternó la realización cinematográfica con su trabajo en producciones para la pequeña pantalla, dirigiendo varios episodios de series tan populares como Los vengadores o El Santo sin que ello supusiera el fin de su relación con la célebre productora Hammer, para la que a comienzos de los 70 realizó filmes tan conocidos como The Vampire Lovers, Las cicatrices de Drácula o El doctor Jekyll y su hermana Hyde.
Por esa misma época dirigió Refugio macabro, donde demostró su pericia en el género de las películas de terror de episodios, y donde dirigió a un estupendo reparto en el que destacaban Peter Cushing, Britt Ekland, Herbert Lom, Patrick Magee, Charlotte Rampling y Robert Powell. También estrenó Kung Fu contra los siete vampiros de oro, una curiosa mezcla de terror y artes marciales también producida por la Hammer Films en una época que sería el principio de su decadencia.
En 1980 se estrenó el último largometraje para cine con la firma de Roy Ward Baker: la mediocre El club de los monstruos. Se trataba de otro film de episodios cuyo único interés era volver a ver en la gran pantalla a dos leyendas del género como Vincent Price y John Carradine. Después, su carrera se reduciría a series de televisión y a algún que otro telefilm.
Roy Ward Baker nació en 19 de diciembre de 1916 en Londres, Inglaterra, y falleció en 5 de octubre de 2010, también en Londres. Tenía por tanto 93 años. Descanse en paz.
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