Sin lugar a dudas, no había mejor manera que empezar nuestro recorrido particular por la programación del Festival de Cine de Sitges 2006 que con esta película de Bong Joon-ho. En The Host (Gwoemul en su idioma original), el realizador coreano cambia de registro respecto de su anterior (e igualmente magnífica) Memories of murder, y realiza una monster movie con todas las de la ley.
Pero el cambio de registro es sólo superficial: cambian los estilemas del género (ahora estamos ante una genuina película de terror, aquella era un thriller policiaco), pero su acercamiento a sendos géneros es el mismo: respetuoso a la par que personal, concentrándose en mostrar las actitudes de sus personajes con credibilidad y pulso narrativo.
La presencia del humor en ambos títulos es contundente: pese al dramatismo de algunas escenas, las peripecias de los policías de Memories of murder, abocados al fracaso, eran tan hilarantes como las desventuras de la familia disfuncional que protagoniza The Host: Bong Joon-ho consigue que el espectador pase de la carcajada a la lágrima con una facilidad pasmosa.
Finalmente, habría que destacar en The Host un sentido de la aventura como hace tiempo que no se veía en la pantalla grande. Los últimos minutos de la cinta no tienen nada que envidiar a algunos de los mejores momentos de la filmografía de John Carpenter. Y si se me perdona el atrevimiento, tampoco a la obra del gran maestro de este último, el imprescindible Howard Hawks.
Así pues, una película imprescindible para los amantes del género fantástico, que esperemos no tarde en estrenarse en España: si la distribuidora confía en ella, y aunque el cine asiático sea por lo general minoritario, The Host lo tiene todo para arrasar en taquilla.
Taxidermia.
ResponderEliminarPesao. :-)
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