viernes, 22 de septiembre de 2006

La huida interminable

Como le ocurre a muchos aficionados a la novela negra, entre mis escritores de cabecera se encuentra sin duda alguna Jim Thompson. Algunas de sus novelas, como las magistrales El asesino dentro de mí o 1.280 almas se cuentan entre mis favoritas.



Es muy complicado trasladar algunas de las constantes de su narrativa, como esa inconfundible manera que tenía Thompson de narrar los hechos más brutales con una extremada frialdad realmente inquietante, al medio cinematográfico. Sólo podría hacerse con la consabida voz en off, de la que tanto se ha abusado en el cine negro, y aun así el resultado no sería tan efectivo.

No obstante, hay que reconocer el mérito de una cinta como La huida, dirigida por Sam Peckinpah y protagonizada por Steve McQueen y Ali MacGraw. En ella, el autor de Grupo salvaje se acercó a la obra de Thompson optando por mostrar los hechos de la manera más gélida posible, consiguiendo que sus personajes se definieran por sus actos, no por sus palabras.

En cuanto a los secundarios, hay que hacer mención a unos fabulosos Al Lettieri y Sally Struthers, como el socio dado por muerto que persigue a los protagonistas para robarles el dinero y la mujer secuestrada por éste.



La película de Peckinpah, de 1972, se mantiene todavía joven, lo que resta bastante razón de ser al remake que hizo Roger Donaldson en los 90 con la pareja, de moda por aquel entonces, Alec Baldwin / Kim Basinger. Y aunque el talento del realizador se dejó ver sobre todo en sus westerns, esta película y Perros de paja tienen justificada su presencia como dos de los thrillers más interesantes de los años 70, década por otra parte realmente memorable para el género.

[Foto: Sam Peckinpah.]

No hay comentarios:

Publicar un comentario