¿Quién nos iba a decir que el mejor cine de terror del nuevo milenio iba a venir precisamente de la mano de un género tan denostado como el de los remakes o nuevas versiones de éxitos pretéritos?
Tres han sido las nuevas versiones de clásicos del horror de los 70 que han conmocionado las plateas en los últimos tiempos.
El primer aviso fue La matanza de Texas (2003) de Marcus Nispel, magnífica y brutal puesta al día del clásico de Tobe Hooper. En ella, los cuerpos perfectos de Jessica Biel y Mike Vogel, entre otros, eran sometidos a continuas vejaciones por parte de la familia de Leatherface, en una de las películas de terror mejor fotografiadas de lo que va de década.
Después, Zack Snyder sorprendía a propios y extraños con Amanecer de los muertos (2004), su remake del Zombi de George A. Romero, segunda de las cuatro partes que conforman su saga de los muertos vivientes. Sus fotogramas demuestran cómo el mundo que nos rodea se viene abajo y no podemos hacer nada por evitarlo. El consumismo no nos salvará de la barbarie.
Y ahora, con el reciente estreno de Las colinas tienen ojos (2006) de Alexandre Aja, se confirma el buen estado de salud del cine de terror norteamericano, aunque sea recuperando el terror político de los 70 versionando los clásicos de Hopper, Romero y Wes Craven.
El remake del francés Aja demuestra cómo un país como los Estados Unidos barre y oculta el polvo bajo la alfombra, sin darse cuenta de que la suciedad sigue allí y pasará factura. Su visión es la de un extranjero que cuestiona el American way of life y demuestra que todos, demócratas y republicanos, han de asumir sus responsabilidades y enfrentarse a sus propios demonios. Y será una lucha cruenta y brutal.
Las colinas tienen ojos es, en definitiva, una de las películas más recomendables que pueden encontrarse ahora mismo en la cartelera... si bien no es, nunca mejor dicho, plato para todos los gustos. Y demuestra que en las colinas, además de las ciudades (como diría Clive Barker en uno de sus relatos más celebrados), también se encuentra el Horror con mayúsculas.
BRUCE TIMM!!!
ResponderEliminarEstoooo... no acabo de cogerlo... :-(
ResponderEliminarCoruña ;-)
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